jueves, 3 de mayo de 2018

NATURALEZA DEL HOMBRE Y EL LLAMADO A LA SANTIDAD


El hombre es la criatura más noble que Dios colocó sobre la tierra. Él mismo dijo:“ Hagamos al hombre a nuestra imagen, conforme a nuestra semejanza…” (Gn 1, 26). Y dijo esto en razón del alma del hombre, que es un espíritu dotado de entendimiento y voluntad divinos. Es de fe que el alma de Adán es creada, es decir, sacada de la nada por Dios. Y lo mismo sucede con el alma de cada hombre. Por haber sido hecho a imagen de Dios, el hombre tiene la dignidad de persona; no es solamente algo, sino alguien. Es capaz de conocerse, de poseerse y de darse libremente y entrar en comunión con otras personas.
 2. Imagen y semejanza de Dios El hombre es la criatura más noble que Dios colocó sobre la tierra. Él mismo dijo: “Hagamos al hombre a nuestra imagen, conforme a nuestra semejanza…” (Gn 1, 26). Y dijo esto en razón del alma del hombre, que es un espíritu dotado de entendimiento y voluntad divinos.
Es de fe que el alma de Adán es creada, es decir, sacada de la nada por Dios. Y lo mismo sucede con el alma de cada hombre. Por haber sido hecho a imagen de Dios, el hombre tiene la dignidad de persona; no es solamente algo, sino alguien. Es capaz de conocerse, de poseerse y de darse libremente y entrar en comunión con otras personas. Condición del ser humano en general
En general los seres humanos somos imperfectos y egoístas, pues tenemos variedad de defectos y debilidades de carácter, y cantidad de carencias físicas, psíquicas y espirituales. En multitud de ocasiones, tratamos de saciar la sed de felicidad, bebiendo en infinidad de fuentes que resultan insatisfactorias, y que, como máximo, sólo logran un momentáneo alivio de la misma, dejándonos la mayoría de las veces insatisfechos y frustrados.
Por nuestra experiencia y la Biblia sabemos que todos hemos pecado y tenemos una naturaleza pecaminosa: (Salmo 51; Eclesiastés 7:20; Romanos 3:9-12,23; etc.) Romanos 3:9-12: ¿Qué, pues? ¿Somos nosotros mejores que ellos? En ninguna manera; pues ya hemos acusado a judíos y a gentiles, que todos están bajo pecado.  (10)  Como está escrito: No hay justo, ni aun uno;  (11)  No hay quien entienda,  No hay quien busque
¿Por qué debemos aspirar a la santidad? ¿Ser cristiano es equivalente a ser santo? ¿Qué implica o significa ser santo?  ¿Nos ha llamado Dios para ser santos? ¿Qué es la santificación? ¿Qué diferencia existe entre justificación y santificación? ¿Es una cualidad imprescindible la santidad para ser salvo? ¿Cómo podemos avanzar en ese camino de santidad?
¿Por qué debemos aspirar a la santidad?
Primera. Porque Dios es santo Como hijos suyos que somos, le pertenecemos, y por ello, debemos ser semejantes a Él.  Su voluntad, incluida y provista en su plan de salvación para la humanidad es que lleguemos a ser santos.
1ª Pedro 1:15, 16: ..., como aquel que os llamó es santo, sed también vosotros santos en toda vuestra manera de vivir; (16) porque escrito está: Sed santos, porque yo soy santo. (Véase Levítico 11:44-45; 19:2)
1ª Pedro 2:9, 10: Mas vosotros sois linaje escogido, real sacerdocio, nación santa, pueblo adquirido por Dios, para que anunciéis las virtudes de aquel que os llamó de las tinieblas a su luz admirable; (10) vosotros que en otro tiempo no erais pueblo, pero que ahora sois pueblo de Dios; que en otro tiempo no habíais alcanzado misericordia, pero ahora habéis alcanzado misericordia

No hay comentarios:

Publicar un comentario